En septiembre de 2020, realizamos nuestra primera residencia artística como colectivo en Molinolab, un espacio de experimentación rural enfocado a la autosuficiencia alimenticia, artística y cultural, situado en Sancti-Spiritus, un pequeño pueblo de la meseta salmantina.
A lo largo de una semana de convivencia, llevamos a cabo un taller con los integrantes del colectivo que nos acogía y con otras personas del pueblo que quisieron participar.
Utilizamos cámaras desechables para fotografiar en blanco y negro el entorno y la cotidianidad desde unas temáticas abiertas y elegidas por lxs propixs participantes.
Tras revelar las fotografías a través del proceso alternativo de caffenol, estas pasaron por un proceso de selección que culminó en una exposición colectiva que llevamos a cabo en las instalaciones del molino, integrando la arquitectura y otros elementos de la realidad rural con la propia coyuntura del proceso artístico que compartimos.